«La acción es la base primordial de todo éxito». - Tony Robbins
Apuntarse a clase de pilates no es una decisión que se pueda tomar de la noche a la mañana, sobre todo por todo lo relacionado con esta disciplina, que es bastante reciente para la mayoría de nosotros. Creada por Joseph Pilates y popularizada a partir de la década de los ochenta, esta disciplina se ha convertido en un método de deporte rico, complejo y lo suficientemente completo como para adaptarse a la mayoría de nosotros.
El pilates es un tipo de deporte que se sitúa a medio camino entre la gimnasia, las clases de baile o el yoga. Lo bastante activo como para mejorar tu condición física, fortalecer tus abdominales o incluso ayudarte a relajarte con una práctica suave. Además, cada vez cuenta con más seguidores...
Aunque tengas la puerta abierta a las clases particulares y grupales, la verdadera pregunta es cómo aprender pilates. No te preocupes, te contamos a continuación.
Las diferencias entre el yoga clásico y el pilates

Entre una clase de yoga y una clase de pilates, encontramos algunas diferencias, aunque muchos piensen que se trata de disciplinas similares. De hecho, el pilates es una disciplina de práctica suave, de gimnasia, que te ayudará a conseguir una condición física ideal, siempre que se siga una práctica regular, por supuesto.
A primera vista, los objetivos del yoga y del pilates no son los mismos. De hecho, mientras que el pilates pone en primer plano la conexión entre el cuerpo, la mente y el espíritu, sin dejar atrás el fortalecimiento muscular, el yoga se inclina hacia una dimensión un poco más espiritual, donde la relajación, la práctica meditativa o los ejercicios de respiración son mucho más protagonistas que en el pilates.
Además, cuando hablamos de las diferencias entre el yoga clásico y el pilates, no podemos obviar los orígenes de las disciplinas. De hecho, mientras que el yoga es una disciplina ancestral, el pilates es un método mucho más reciente, creado en los Estados Unidos por un alemán (Joseph Pilates) y desarrollado durante el siglo XX. Valores que, aunque sean similares, también difieren de vez en cuando.
Asimismo, es de destacar que, aunque la respiración es un motor para las dos, en el pilates no se usa de la misma manera, ya que tiene un propósito diferente. De hecho, en el yoga la respiración adquiere una conciencia corporal que se sitúa como una fuente real de energía, según la intensidad que se le dé.
Como ya hemos comentado, el yoga centra sus ejercicios de respiración en la mente, la espiritualidad, la paz interior, mientras que el pilates centra su ejercicio de respiración más en la forma física, en la secuencia de movimientos, o incluso en las clases de fitness y el ejercicio físico.
Además, también podemos encontrar diferencias con respecto a las posturas, una diferencia importante entre las dos disciplinas. El pilates está, de hecho, más centrado en el fortalecimiento, en el trabajo de los glúteos, en los estiramientos, en el desarrollo del suelo pélvico y la musculatura. Por su parte, el yoga tiene más que ver con la mente. Por supuesto, contribuye a aliviar el dolor de espalda, pero es más probable que el pilates ayude a aliviar el dolor de espalda o actúe contra el estrés.
En definitiva, se trata de dos filosofías distintas, dos formas de entender el ejercicio físico y el deporte saludable, gracias a numerosos ejercicios que combinan cuerpo y mente en ambos casos.
Si te estás inclinando hacia el pilates, deberás entender cómo se desarrolla una clase de pilates, ¿no?
¿Cómo se desarrollan las clases de pilates?

¿Pilates en casa o en grupo? Pues antes de plantearte cómo son las clases de pilates, lo primero que deberás preguntarte es por qué quieres dar este tipo de clases. En las clases particulares o grupales, todo está bien organizado para proporcionarnos una conciencia real del cuerpo, vinculada a la columna, los abdominales glúteos, la caja torácica, el vientre plano o incluso el dolor lumbar; una armonía perfecta para cumplir con los deseos y necesidades de cada alumno.
No obstante, cuando pensamos en una clase de pilates, debemos preguntarnos cuánto puede costar una sesión. De hecho, el precio de una sesión varía según el tipo de curso en cuestión. En las clases grupales, puedes pagar entre 10 y 20 euros por sesión, de media, mientras que una lección individual puede rondar incluso hasta los 30 euros. Por supuesto, hay que tener en cuenta también las diferentes fórmulas de suscripción, que muchas veces buscan hacer un descuento si tomas más de una clase.
En cuanto al tiempo, la duración de una sesión puede ser de unos 45 minutos de media, para una clase donde podemos trabajar la postura, el cinturón abdominal, los grupos musculares, o incluso sentirnos bien con nuestro propio cuerpo. Sácale el máximo partido a todos los beneficios del pilates para el cuerpo y el espíritu, de forma eficaz, y, por qué no, consigue un vientre plano.
El profesor de pilates también es una pieza clave en la sesión, ya que se posiciona como el instructor. Un instructor que orienta, asesora a sus alumnos y trata de ayudarte a sacar el máximo partido de cada postura. Si estás embarazada, o no, si tienes problemas de espalda... el profesor te ayudará en cada clase.
En cuanto al desarrollo de cada sesión, en la primera sesión se suele hacer una breve introducción histórica de la disciplina, mientras que en el resto de sesiones se irán enseñando diferentes ejercicios, según los objetivos de cada uno, los deseos del profesor, pero también el número de alumnos, ya sea que estemos hablando de clases individuales o grupales.
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¿Cuánto cuesta una clase de pilates?

A la hora de tomar la decisión de si dar clases de pilates, hay una pregunta que hay que plantearse: ¿cuánto cuesta una clase de pilates? El precio depende de una serie de criterios, que es importante, incluso necesario, tener en cuenta para avanzar lo mejor posible e invertir en los principios fundamentales de la disciplina.
Como ya hemos comentado, el precio medio de una lección individual es de 30 €, mientras que una sesión grupal puede costar entre 10 € y 20 €. Sin embargo, hay de todo, y estos precios pueden variar según donde estemos, sea cual sea nuestro deseo, nuestra necesidad y nuestro presupuesto.
De hecho, si nuestro presupuesto ideal se acerca a cero, entonces tendremos que apostar por los vídeos en línea, en particular en YouTube. Sin embargo, este tipo de enseñanza, aunque no es caro, tiene sus limitaciones. Debido a la ausencia de un profesor particular, no podremos sacar el máximo partido de las posturas, movimientos y de nuestra progresión en pilates.
Si quieres trabajar la columna vertebral, los músculos del cuerpo o incluso prepararte físicamente, independientemente de que tengas un nivel principiante o intermedio, todo recae en el profesor, que por supuesto no trabaja gratis. Por esta razón, suele ser mucho más rentable y eficaz pagar por las clases de pilates.
Por lo tanto, he aquí la razón principal por la que pagar por las lecciones de pilates: progresar de una manera más eficiente y rápida. En un grupo, el ambiente es de progresión común, mientras que en una sesión individual, la progresión se realiza de forma más intensa, por la sencilla razón de que somos el único alumno sobre el que recaerá toda la atención del profesor.
¿Qué criterios deberás tener en cuenta a la hora de escoger clases de pilates?

Después de haber tenido en cuenta todos estos criterios, debemos preguntarnos cómo podemos elegir una clase de pilates, una pregunta un tanto complicada. Cada movimiento que realizamos en clase está guiado por la forma en que se aprende, sobre todo gracias al profesor. Una buena clase de pilates se define por muchos criterios, y el profesor es la base de la calidad de cada ejercicio.
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De hecho, un instructor, sea cual sea su formación, su planteamiento o su programa, se convierte en el eje de la calidad de una clase de pilates. Entre clases grupales y clases particulares, el profesor se alza como una verdadera herramienta de desarrollo, que permitirá - o no - trabajar la fuerza, tonificarnos, estirarnos lo mejor posible, o tener vértebras más sólidas.
El tipo de curso también es un criterio que deberás tener en cuenta para saber si la clase de pilates es adecuada para ti o no. Entre clases grupales, lecciones individuales o lecciones en línea, todo es posible, según los deseos, necesidades y presupuesto de cada alumno.
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El presupuesto es parte de la calidad de los ejercicios de pilates. Sin embargo, existe una alternativa que es mucho más sencilla, efectiva y muchas veces más económica que el resto, y esa es: ¡Superprof!
De hecho, gracias a nuestros profesores cualificados, podremos apuntarnos a clases de pilates en la mayoría de las ciudades, por un precio imbatible, ya sean lecciones particulares o grupales. Entonces, ¿a qué esperas para descubrir el pilates?